Detenido por organizar una guerra de pistolas de agua por Facebook
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Hoy quiero hacer espacio para una noticia un poco surrealista, es viernes y es el día perfecto para relajarse, el fin de semana está muy cerca. El humor nunca está de mas y las redes sociales tienen su parte divertida. Yo creo que ese es el motivo por el que uso Twitter, para pasar el rato y para reírme con amigos y compañeros e incluso con totales desconocidos. Aunque las risas en este caso son por la extravagante noticia. Increíble pero cierta.
¿Cuál? Pues resulta que un hombre ha sido detenido en Reino Unido por organizar en Facebook y BlackBerry Messenguer una guerra de pistolas de agua. La verdad que puede parecer exagerado que se detenga a alguien por un tema tan poco importante. Pero después de las revueltas que ha habido en Reino Unido y el papel que ha tenido las redes sociales no extraña esta excesiva susceptibilidad. Ya os contamos como en Nueva York se ha creado una brigada especial para buscar criminales en redes sociales. Está claro que en Reino Unido se delinque con mucho menos y que siguen vigilando las redes sociales. Así que volvemos al tema de siempre con la privacidad y la legitimidad de la policía para buscar en las redes sociales.
Así que en Essex, que es la ciudad del joven “revolucionario” y que está relativamente cerca de Londres, se quedan sin guerra de pistolas de agua. Una pena porque con el calor que hace nunca está de más iniciativas como esta. El chaval tendrá que ir la semana que viene a juicio por todo este asunto. Me gustaría ver la cara del juez y el abogado que tenga que lidiar con este asunto. Sin duda, no hay mejor manera de tirar el dinero de los contribuyentes, en juicios absurdos y en policías vigilando que no se cometan guerras de pistolas de agua. Supongo que todo quedará en la anécdota que pueda contar el hombre a sus amigos y conocidos.
Estoy poco brillante para hacer chistes sobre la noticia. ¿Alguna sugerencia? Y antes de irme os aviso, tened cuidado con lo que organizáis en Facebook o en cualquier red social porque se os puede caer el pelo o al menos perder una tarde y una mañana.
